Óleo sobre lienzo ovalado Firmado y fechado en Manila (ángulo inferior izquierdo) Medidas 105 x 73 cm

Procedencia:

– Colección particular, Madrid.

Félix Resurrección Hidalgo está considerado como uno de los mejores pintores filipinos del siglo XIX. Nacido en el seno de una familia acomodada, renunció a una prometedora carrera de jurisprudencia para estudiar el arte de la pintura. Sus primeras lecciones las recibe en la Academia de Dibujo y Pintura de Manila, bajo la maestría de Agustín Sáez y Glanadell. En 1875 realizó un conjunto de pinturas costumbristas que reproducen con gran fidelidad el mundo rural filipino. Algunas de estas obras figuraron en la Exposición Universal de Filadelfia como el Pescador de Sacag o la Vendedora de Lanzones del Museo del Prado o la Banca (colección Eleuterio Pascual, Manila) o los Mendigos (colección Dr. Alejandro R. Roces, Manila). En 1879 obtuvo una beca para estudiar en la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando de Madrid. Esta obra inédita que ahora damos a conocer se inscribe en los últimos años de etapa de formación del artista. Sus frecuentes visitas al Museo del Prado enriquecieron su capacidad creativa dotando a sus obras de un lenguaje más avanzado que adolecían sus primeras creaciones. Hidalgo abandona el estatismo que caracterizaba algunas de las obras tempranas por una composición mejor resuelta donde las figuras principales se insertan con gran convicción en el paisaje. La escena representa a una joven pareja de tagalos, humildes gentes de los esteros, ataviados en sus trajes típicos, ella viste la baro’t saya y el mozo el Barong Tagalog con el característico sombrero denominado Sakalot. El muchacho observa con detenimiento a la moza mientras ella concentra su mirada en el río ocupada en la pesca. Sin duda nos encontramos ante una de las creaciones más bellas de Hidalgo que parece evocar las Fête Galante francesas de Watteau y Boucher.